
Foxconn, la firma electrónica de Taiwan que assembla iPhones de Apple, anunció este lunes que sus fábricas en Shenzhen suspendieron sus operaciones después de que la ciudad imponiera una lluvia de coronavirus.
Desde enero, las fronteras de Shenzhen han reportado cerca de 3,780 muertes y más de 700,000 nuevos casos. El número de casos reportados en el resto de China está aumentando rapidamente, debido a la baja tasa de infecciones reportadas en la región. China reportó 3,122 nuevos casos en el domingo, cerca de triple la cifra en septiembre y tres veces el lunes.
Shenzhen, un centro de fabricación electrónica con una población de 17 millones, reportó 66 nuevos casos este lunes. Sin embargo, el cierre de las empresas y el transporte público en la ciudad está obligando a los trabajadores no indispensables de permanecer en casa.
Foxconn dijo que había adaptado la línea de producción a otros plantos en China para reducir el impacto y obligado cualquier empleado pedir P.C.